El semáforo de las emociones trata de aplicar el funcionamiento del semáforo para enseñar al niño a que aprenda a gestionar sus emociones negativas. Los niños comprenden a la perfección cómo funciona el semáforo. El rojo indica no pasar, es decir, esperar, el amarillo indica que pronto se podrá pasar, con lo cual puedes empezar a prepararte para dar tus primeros pasos. El verde significa puedes pasar. Si trasladamos estos colores y lo que representan a un ataque de ira o a un berrinche, los niños aprenden a gestionar sus emociones como si de un juego se tratara. Para ello, es necesario asociar los colores del semáforo con las emociones y la conducta.
Me gusta mucho como se muestra la información de manera sintetizada y con una presentación impecable.
ResponderBorrarEn cuanto al semáforo de las emociones me gusta como se realizó, los materiales son fáciles de conseguir y se puede recrear en casa.
Es muy creativo tu trabajo, me gustó mucho que hagas las caritas porque ayudan a identificar más lo que se está queriendo decir. Felicidades ☺️✨
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